Miercoles 5 de noviembre del 2025
«Entonces ustedes me invocarán, y vendrán a suplicarme, y yo los escucharé.» (Jeremias 29:12)
MI REFLEXION:
Señor, en este día que comienza, te entregamos nuestra vida entera: nuestros pasos, nuestros anhelos, nuestras cargas y nuestros sueños. Que tu luz vaya delante de nosotros, abriendo caminos, sanando heridas y fortaleciendo cada área de nuestro corazón. Bendice nuestros proyectos, Señor. Que todo aquello que emprendamos hoy y cada día esté guiado por Tu sabiduría, que sea fruto de Tu voluntad y que nos acerque a la plenitud, a la paz y a la prosperidad que Tú quieres para nosotros. Te presentamos nuestra salud, la de nuestra familia y la de quienes amamos. Que tu mano poderosa coloque equilibrio, fortaleza y bienestar en cada cuerpo, en cada emoción y en cada pensamiento. Haz que la paz sea nuestra medicina y que tu amor sea nuestro descanso.
Señor, te pedimos también por nuestra relación de pareja. Que haya comprensión, respeto, paciencia y ternura. Que las palabras sanen y no hieran, que los silencios abracen y que cada día, incluso en medio del cansancio o la distancia, recordemos que el amor es un regalo que debemos cuidar con fe y con humildad. Bendice a nuestros hijos, protégelos y cúbrelos con tu gracia. Pon en ellos claridad, dirección, y un espíritu fuerte y noble. Que cada paso que den esté iluminado por Tu presencia y que encuentren siempre amor, guía y seguridad en nosotros.
Hoy te pedimos bendiciones completas: para nuestra casa, nuestros trabajos, nuestras decisiones, nuestros caminos y nuestros momentos de fragilidad. Que este día esté lleno de señales tuyas, de oportunidades, de puertas abiertas, de protección y de calma. Gracias, Señor, por tu guía, por tu amor que no falla y por acompañarnos en cada paso, incluso cuando no sabemos a dónde vamos.
En tus manos dejamos este día y nuestra vida entera. Amén.
Oremos con esta melodía