Lunes 14 de abril del 2025
“Dios no llega tarde. Él llega en el momento perfecto para hacer florecer lo que sembraste con fe.” “Dios hizo todo hermoso en su momento.” (Eclesiastés 3:11)
MI REFLEXION:
A veces parece que nada se mueve, que lo que soñamos se quedó atrapado en una pausa eterna. Hacemos todo lo que está en nuestras manos, pero los resultados no llegan. Y en el silencio de la espera, la duda nos susurra: “¿Estaré haciendo algo mal?” Pero hay procesos que no se ven, y aun así están ocurriendo.
¿Sabías que el bambú puede pasar hasta cinco años creciendo bajo tierra antes de asomar un solo brote? Mientras parece que no hay nada, sus raíces se están extendiendo, haciéndose fuertes para sostener todo lo que vendrá después. ¿Y si tú estás en esa etapa invisible donde Dios te está haciendo más fuerte?” Así también pasa contigo.
Lo que ahora te parece lento o estancado puede ser en realidad una etapa invisible de construcción, de fortalecimiento interior, de preparación. Tal vez Dios está trabajando contigo desde adentro, afirmando tus raíces, enseñándote a confiar, moldeando tu carácter para que cuando llegue el momento de florecer, nada ni nadie pueda derribarte. No te compares con los que ya están cosechando. Tú también estás creciendo, aunque no se vea. Y cuando brotes, cuando por fin se note todo lo que has estado sembrando con lágrimas, esfuerzo y fe, entenderás que no era demora, era formación. Ten paciencia contigo, y confia.
Cierra con esta hermosa canción “En la espera”
Mis Reflexiones 