Lunes
17 de marzo del 2025
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. (Mateo 7:8)
MI REFLEXION:
Hay momentos en nuestras vidas, en los que todo parece perder sentido. Todo lo que haces sientes que está mal, las cosas no te salen. La tristeza pesa como una losa o concreto, la confusión nubla la mente y el desánimo te invade. Son esos días en los que te preguntas: ¿Qué más puedo hacer? ¿A dónde voy ahora? ¿Como debo actuar? Y es ahí, en ese punto de quiebre, donde la oración con fe hace la diferencia. Donde debes reconocer que tus cargas debes entregarlas a Dios.
Orar con fe no es solo repetir palabras o pedir por pedir. Es abrir el corazón, es derramar el alma sin reservas, es reconocer que no puedes solo(a) y confiar en que Dios sí puede. Es soltar el miedo, la duda, la ansiedad, y depositarlos en Sus manos. Cuando oras con fe, algo cambia dentro de ti. Tal vez las circunstancias no se transformen de inmediato, pero tu corazón sí. Recibes paz en medio de la tormenta, claridad en medio de la confusión y fortaleza cuando sientes que ya no puedes más. La oración con fe no solo busca respuestas, sino que te llena de la certeza de que no estás solo(a), de que hay un propósito más grande en todo lo que vives. Porque cuando clamas con fe, Dios escucha. Cuando le hablas con sinceridad, Él responde, a veces en susurros, a veces en señales que solo un corazón atento puede percibir.
Oremos: Señor, en este momento de duda y desánimo, vengo a Ti con un corazón sincero. A veces no entiendo lo que sucede, pero elijo confiar en Ti. Te entrego mi tristeza, mi miedo y mi incertidumbre, sabiendo que Tú tienes el control. Te entrego mis proyectos, pon todo en un Orden Divino. Dame la paz que solo Tú puedes dar, la fuerza para seguir adelante y la fe para creer, aun cuando no vea el camino. Sé mi guía, mi refugio y mi esperanza. En Ti descanso, Señor. Amén. (Una muestra de como puedes orar, agrega cosas, abre la boca, ORA, ORA SIN CANSARTE.
Cierro con esta bellísima canción “Cuando Oras”