Lunes 10 de marzo del 2025
“Sed santos, porque yo, el Señor, vuestro Dios, soy santo” (Levítico 19:2)
MI REFLEXION:
Realmente se puede ser Santo? Si lo ves desde el punto de vista religioso, muchas tradiciones creen que la santidad es un llamado especial, alcanzado a través de la fe, las obras y la gracia divina. En nuestra Iglesia Católica, por ejemplo, la santidad se asocia con personas que han vivido de manera ejemplar y han sido canonizadas.
Pero si lo piensas desde una perspectiva más humana y espiritual, la santidad podría entenderse como la búsqueda de la bondad, la compasión y la integridad en la vida cotidiana. No significa ser perfecto, sino esforzarse por hacer el bien, vivir con amor y mejorar constantemente. Yo en lo personal me identifico mucho con este tipo de santidad. Siempre he dicho que no soy una mujer santa para canonizarme, ni monja, ni Pastora, pero siempre tengo un corazón dispuesto a perdonar, a ser compasiva, a ser empática, sin hacerle el mal a nadie, por lo menos trato, prestar ayuda al prójimo, y sobre todo imito a mi Jesús en la humildad o sencillez, pienso que no hay que estar haciendo alardes de lo que uno tiene o pueda tener.
«Ser santo no significa ser perfecto, sino vivir con amor, integridad y propósito. Es un camino diario de crecimiento, donde cada acto de bondad, cada gesto de compasión y cada esfuerzo por hacer el bien nos acerca a esa santidad que Dios nos invita a vivir. No se trata de estar libres de errores, sino de tener un corazón dispuesto a mejorar y reflejar su luz en el mundo.»
Cierro con esta linda canción “La Luz Brilla”
amen
Bendiciones!!!
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