Miercoles 19 de febrero del 2025
«Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza.» (Salmos 46:1-3)
MI REFLEXION:
Oremos: Señor amado, en este tiempo de temblores y tormentas, venimos a Ti con un corazón humilde, buscando refugio en Tu presencia. A veces, el miedo nos invade, las preocupaciones nos roban el descanso y la incertidumbre nos sacude más que la misma tierra. Pero hoy recordamos que Tú eres nuestro refugio seguro, la roca firme que jamás se mueve. Te pedimos, Padre, que calmes nuestro corazón y nos llenes de Tu paz, esa paz que sobrepasa todo entendimiento. Que en cada sacudida podamos recordar que no estamos solos, que Tú sostienes nuestra vida con manos de amor.
Danos fe para confiar en Tu cuidado, valentía para mantener la calma y fortaleza para sostener a quienes nos rodean. Que, en lugar de miedo, habite en nosotros la certeza de que Tú gobiernas sobre todo y nada escapa de Tu control. Te entregamos nuestros miedos, nuestras angustias y todo lo que perturba nuestra paz. Que en cada amanecer renovemos la confianza en que Tú nos guardas, nos proteges y nos sostienes con Tu amor eterno.
Que en cada latido de nuestro corazón resuene la verdad de que somos Tus hijos, amados, protegidos y guiados por Tu poderosa mano. Gracias, Señor, porque, aunque el mundo tiemble, en Ti encontramos estabilidad y esperanza. En el nombre de Jesús, amén.
Cierro con esta bella canción de confianza “Eres mi paz”