Jueves 22 de febrero del 2024
Cuando te invoqué, me escuchaste, Señor (Salmo 137)
MI REFLEXION:
Hoy nos apoyamos en el salmo 137, donde llenos de Fe y confianza en el Señor pedimos, invocamos, suplicamos, todas esas cosas que tenemos en nuestros corazones. Dice el Señor en su palabra en Mateo 7: Pidan y se les dará. Hoy Señor queremos pedirte, orarte.
Ponemos en tus manos mi Señor ante todo nuestra salud, llénanos de vitalidad, de fuerzas, y todo órgano quebrantado, por el poder de tus llagas, sánalos Señor. Te pedimos por nuestros hijos, tu los conoces a cada uno, sus corazones, tócales mi Dios, cambia esos corazones de piedra por corazones de barro. Por nuestras familias y hogares, bendícenos Señor, aleja toda acechanza del enemigo, todo peligro. Te pedimos por nuestras parejas, llénanos de Amor, de armonía, sabiduría para que exista entendimiento, fidelidad, respeto y empatía. Señor no te apartes un segundo de nosotros, queremos caminar contigo, que tu sigas siendo nuestro guía y nuestro sostén. Amen.
Cierro con esta hermosa cancion, abre tu corazón y déjate tocar por el Santo Espiritu de Dios. «Inundame Señor con tu Espiritu»