Lunes 14 de noviembre del 2022
Cuídame, oh Dios, porque en ti busco refugio. Yo le he dicho al Señor: «Mi Señor eres tú. Fuera de ti, no poseo bien alguno». (Salmo 16:1-2)
MI REFLEXION:
Aprendí que, confiar en Dios trae paz al corazón. Cuando confiamos en nuestro Padre celestial, depositamos en él nuestra fe y descansamos tranquilos porque sabemos que él está a nuestro lado y nos ayuda. Aprendí, que la confianza en Dios no nos libra de los momentos inciertos o difíciles de la vida, sin embargo, sí nos ayuda a enfrentarlos con entereza y fe. Quien confía en Dios sabe que él no lo abandona ni permite situaciones que vayan más allá de lo que pueda soportar.
Aprendí, además, que luego de confiar en mi Dios y en mí, puedo abrazar mis temores, caminar, avanzar y llegar a lo que deseo lograr. Aprendí que, para ser Feliz, no se necesita estar siempre con alguien al lado, también solos podemos ser plenamente felices; aprendí a amarme más, a disfrutarme más, a no sentirme aburrida sola, sino gozar, divertirme sanamente al máximo. Aprendí, además, que debemos vivir el aquí y el ahora, no estar pensando tanto en el futuro y mucho menos en lo que ya paso. Aprendí, además, que las oportunidades hay que agarrarlas con firmeza, disfrutarlas al máximo y luego ser agradecidos. Aprendí a confiar en mí, en que yo sí puedo, en que yo soy capaz.
En esta ocasión, me toco viajar solita, y al principio tenía muchas incertidumbres, temores, lo cual quiso ponerme un poco tensa. Sin embargo, como siempre, deposite toda mi confianza en mi Dios y en su corte de ángeles, y una vez me dio muestra, que nunca me abandona, que siempre está ahí conmigo y que es quien me apoya en todos los momentos de mi vida. Gracias mi Dios, gracias. Hoy, una vez más, te invito a depositar toda tu confianza en el Señor, en todos los aspectos de tu vida. Amen. Termino con esta canción “Mi confianza está en ti”
Mis Reflexiones 