Martes 1 de noviembre del 2022
Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo. (Efesios 6:11)
MI REFLEXION:
Un día iba a servir en un retiro, a dar lo mejor de mí, como siempre confiada de mi trabajo, de mi entrega en que lo hago, con Amor y esmero. Recuerdo que una persona me dijo: hay que trabajar mucho, tienes que prepararte para lo que vas a vivir, porque aquí en esta experiencia podrás ver una batalla de ángeles y demonios. Me quedé pensando y dije dentro de mi: ¿Como así?, pero no le hice mucho caso, porque si hay algo que yo tengo es, que hago mi trabajo con Amor, compasión y empatía.
Quise indagar un poco sobre esa expresión y encontré que, Los ángeles representan lo bueno y puro, mientras que los demonios simbolizan lo malvado y lo oscuro. Enseguida me vino a la mente que el que piensa así es porque en su mente y corazón hay más espacio para sus demonios. Pensé eso porque siempre he creído que con el Amor y la compasión tu puedes aplacar los demonios que otro lleve dentro: quizás su negatividad, su envidia, su ego descontrolado, su ira, su rabia, etc. Se que todos tenemos nuestro carácter, pero debemos saber controlarlos, y no pensar que es una batalla de ángeles y demonios.
Ahora te pregunto yo a ti: ¿Estás luchando contra tus propios demonios o intentando controlarlos? Yo quizás podría tenerlos, pero lo que si te aseguro es, que abro mi corazón a que sean los Ángeles que habiten en mí, que sean ellos que manejen y guíen mi vida. Sobre todo, mi Ángel guardián. Amen.
Cierro con esta bellísima canción que la repito de nuevo “Ángeles volando en este lugar”