Lunes 15 de agosto del 2022
Dice una canción: Pongo en tus manos las penas y el dolor todo el esfuerzo el trabajo y el temor y pongo en tu mesa mi pobre corazón y vengo a decirte lo que siente mi interior.
MI REFLEXION:
En este inicio de semana, vengo mi Señor a poner en tus manos todas nuestras vidas: proyectos, pensamientos, sentimientos, inquietudes, salud, miedos, TODO SEÑOR. Necesitamos que sigas encaminando nuestras vidas, que tu Señor seas quien te encargue de guiar, de dirigirnos hacia donde tu quieres que vayamos.
Señor gracias por tu compañía, por tu presencia en nuestras vidas. Gracias Señor porque cuando te pedimos y te clamamos, tu no tardas en responder. Gracias mi Dios. Confiamos en ti, esperamos en ti, descansamos en ti. Amen, amen, amen. Termino con esta hermosa canción que me encanta, me transporta a mis tiempos de la Casa de la Anunciación con María Valera, quien fue a través de sus canciones que toco mi corazón, además quien luego el Señor me la puso cerca en mi Comunidad donde hizo Emaús, y me toco a mi cantarle a ella. “Pongo en tus manos”